El tema de hoy es un tema muy polémico y en el que es para mí difícil tener una posición excesivamente clara tanto a nivel profesional como a nivel personal familiar. Hablamos de cómo debemos afronta la navidad con los niños y niñas, si es correcto seguir con las tradiciones de Papá Noel y los Reyes Magos, si entendemos esto como una fantasía o por contra como que estamos mintiendo a los niños. Muchas dudas que intentaremos resolver en el programa y artículo de hoy.
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¿Qué opina la psicología infantil sobre las fantasías navideñas?
Si ahondamos en la parte de la psicología infantil y el mundo de las pedagogías alternativas también vemos que existe bastante debate e incluso posturas encontradas. Dentro del mundo de la psicología infantil:
- Tenemos profesionales partidarios de no mentir en absoluto ya que puede dañar el vínculo entre personas adultas de referencia y niños o niñas, al ser consideradas como modelo y ejemplos de honestidad, se rompería la confianza que las criaturas han depositado en nosotros y se fomentaría la credulidad. Aquí podéis encontrar un artículo conocido en la revista The Lancet que defiende esta postura: http://www.thelancet.com/journals/lanpsy/article/PIIS2215-0366(16)30363-7/abstract
- Otros, dicen que quizás podamos estar ayudando a crear una mente crítica y escéptica ya que el proceso de ir descubriendo y darse cuenta de la realidad y la fantasía, puede ser un proceso de maduración. Según esta postura además, la fantasía de la navidad fortalece la autoestima del niño o la niña que consigue superar la decepción y se enorgullece de su descubrimiento. Defensora de esta postura es la psiquiatra finlandesa presidenta de honor de la Asociación Mundial para la Salud Mental Infantil, Tuula Tamminen.
- Desde la perspectiva psicoanalítica, algunos abogan porque las figuras de Papa Noel o de los Reyes Magos son arquetipos que hacen referencia a la figura de los padres y que todo el ritual es algo simbólico que puede servir para integrar valores universales de los humanos, que hay que tener una mirada más trascendental del asunto.
¿Qué opinan las pedagogías alternativas sobre la fantasía de la navidad?
Por otro lado, desde la mirada de las pedagogías alternativas también hay controversia respecto a seguir o no la tradición de los Reyes Magos y Papa Noel.
Montessori
Montessori no era partidaria de fomentar la fantasía en los niños y niñas muy pequeños, porque consideraba que todavía les era difícil hacer una distinción entre lo real y lo fantástico y por ello apostaba por acercar al niño al mundo real, que por otro lado estaba ya lleno de cosas fascinantes por descubrir de por sí. María Montessori era partidaria de introducir los cuentos de hadas en etapas posteriores, donde la capacidad del niño para diferenciar qué era cierto de qué no era mayor. Ese momento correspondería también a las etapas madurativas infantiles que pasan de lo concreto a lo abstracto.
Waldorf
Sin embargo, si nos vamos a la mirada Waldorf, el misterio, la fantasía y lo simbólico es algo que debemos preservar y cuidaren las etapas infantiles. Por ello, las navidades en las escuelas Waldorf están llenas de rituales, cuentos, villancicos, teatralizaciones sobre el nacimiento, etc.
Escuelas libres
Desde la mirada de las escuelas libres, el posicionamiento de espacios libres de religión suele ser claro, por lo que se suele optar por celebraciones más cercanas a los ciclos estacionales, celebrando la entrada del invierno. Cada proyecto o colectivo puede encontrar miles de maneras de hacerlo, pero normalmente no se hará referencia a las figuras de Papá Noel o Reyes Magos en el espacio aunque como ya digo en este tipo de escuelas la diversidad es muy grande.
Algunas escuelas tradicionales también comienzan a plantearse que desde la escuela se continúe con el mito y con esta tradición única ya que cada vez en los colegios españoles tenemos más variedad cultural dentro de las aulas y no parece muy adecuado ofrecer una sola mirada “verdadera” de como vivir y celebrar estas fechas.
¿Hay estudios científicos al respecto?
¿Y qué dicen los estudios científicos de todo esto? Pues la verdad es que no he podido encontrar ningún estudio realizado donde se evalúen las consecuencias de niños o niñas que se han criado con la fantasía de la existencia la figura de Papa Noel o los Reyes Magos y aquellos que no. Es decir, no hay estudios científicos que avalen de los beneficios ni tampoco de los prejuicios de la fantasía de la navidad.
Sí, que he encontrado un estudio sobre el uso de estas figuras como formas de modificación del comportamiento, es decir, padres y madres que utilizan a Papá Noel o los Reyes Magos como formas de soborno, chantaje o amenaza para que sus hijos e hijas cuando se acercan las fechas navideñas sean “buenos” y “obedientes” para que les traigan los regalos deseados. El estudio, como todos los estudios sobre técnicas de castigo, revelaba que efectivamente los padres y madres conseguían reducir algunas conductas disruptivas de sus hijos e hijas, pero que pasado el periodo de tiempo navideño todo vuelve a ser igual. Os dejo el enlace a un estudios sobre el cumplimiento de normas en un grupo de niños y niñas que se les dice que un ser invisible les observa: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/21377689.
Papá Noel y los Reyes Magos como forma castigo o chantaje
Y en este aspecto sí que tengo una posición clara, no estoy de acuerdo en utilizar las figuras de Papá Noel o de los Reyes magos como formas de manipulación para conseguir que los niños y niñas obedezcan. Como ya he comentado en otros programas sobre el castigo, es un método que no sirven para interiorizar las verdaderas razones de no realizar comportamientos que dañan, sino que externalizan los valores que deberían ser internos y hacen que los niños y niñas no reflexionen sobre sus actos, no tomen responsabilidad y además, vivan en un mundo amenazante con el miedo a las consecuencias que les aplicarán de forma externa unos seres superpoderosos si no los juzgan como “niños buenos”.
Entonces, ¿cómo podemos gestionarlo?
Y si no utilizamos a Papa Noel y los Reyes para manipular pero sí seguimos con la fantasía de su existencia y de los regalos, ¿eso está bien?
No tengo la respuesta. Os puedo contar que como mamá yo he dejado que mis hijos estuvieran con esa fantasía sin promoverla demasiado desde mi parte, ya se ocupan los medios de comunicación, vecinos, familia y demás… Mis hijos cumplen años muy cerquita de Navidad con lo que los regalos que han llegado de diferentes personas no se han diferenciado mucho entre si eran por cumpleaños o por Navidad y entre toda esa confusión nos hemos movido estos 5 años. Pero, ellos sí han tenido sus regalos de navidad cada año, han puesto el árbol con sus luces de colores que les han dejado embelesados durante horas, han ido a las cabalgatas de los Reyes, hemos ido a las macrocomidas familiares, hemos hecho y tomado turrón y los diferentes dulces de la época. El enfoque no es para nada religioso sino como momentos de vacaciones para ver la nieve, para compartir en familia que vemos muy poquitas veces al año, para ver amistades y participar eventos culturales que se dan los barrios y los pueblos que nos rodean.
Ante una pregunta directa, una respuesta sincera
Hace poco con el comienzo de las campañas navideñas y los cientos de anuncios de publicidad en todas partes, uno de mis hijos me preguntó, así directamente, si los regalos los hacia yo. Ante una pregunta tan directa, yo si sentí que era mentir, que era no confiar en él, si hace esa pregunta es porque quiere saber y está preparado para ello, yo considero. Así que contesté desde la sinceridad y muy tranquila que sí que los hacia yo, que era un juego que se hace y a partir de ahí surgieron muchas preguntas. Mi hijo personalmente, no expresó ningún impacto emocional de decepción, sino más bien curiosidad por saber más cosas sobre el tema. Después fue a decírselo a su hermano, que tiene su misma edad, y su hermano, que estaba pintando, a penas paró de hacer su actividad, para escuchar de que estábamos hablando. Sin embargo, después de toda la conversación, mi hijo me lanzó su reflexión final “Y no puede ser mamá que no vengan los Reyes por que nosotros nunca les escribimos la carta como los otros niños y por eso tienes que hacer tú los regalos?” ¿Cuál fue mi reacción ante eso? Sonreír, callar y contestar “Pues puede ser… ¿tú quieres probar?” Me encanta la mirada infantil del mundo que siempre es capaz de dejar espacio para la magia y lo imposible, y no voy a ser yo la que le diga lo contrario. Así que, quizás este año probemos a escribir la carta y ¿quién sabe…? Useful tips are awaiting you right here.
Ester dice
Me ha encantado leerte, sintonizo mucho con tu manera de abordar el tema. Empatía, sentido común, amor y la magia del juego o el juego de lo mágico.
Vero dice
Mis hijas tienen dos años y no quiero mentirlas, me siento mal cuando digo que los Reyes vendrán y es mentira, me gustaría enfocarlo de otra manera. Pero, ¿qué decir el día de antes de Reyes para hacer referencia a los regalos? ¿O preguntarles qué se piden para los Reyes? ¿Cómo podemos abordar estos temas sin mentir?
Gracias, saludos.
Ana Lucía Valdez dice
Me pareció interesante la manera en que abordaste el tema. A mi se me educó que los regalos los traía el Niño Jesús. Mi mamá siempre nos dijo la verdad sobre Papá Noel. Repecto al Niño Jesús, cuando supismos mis hermanas y yo que mis papás nos compraban realmente los regalos, no nos causó conflicto ni trauma. Hemos sido una familia creyente pero hasta ahí. Ahora que soy mamá, sí me gustaría llevar el tema de Navidad con mi hija siendo sincera con ella. Mi esposo si creyó en Papá Noel, y yo la verdad no me siento tan sincera en eso. Hemos decidido contarle que papa y mamá le traeran una sorpresa por que en Navidad nos gusta recordar que estamos juntos y agradecer todo lo que tenemos y compartir tiempo en familia, en paz, y en amor. Y que el niño Jesús nace ese dia.. por que es nuestra creencia.
Me encantó la parte en la que mencionas que cada familia crea sus tradiciones!!
Lisandro dice
Qué de vueltas. !! No es más fácil decirles la verdad desde el comienzo con un » esto te regalamos papa y mama para Navidad » o «.. a ver qué te regalan los abuelos para » . El niño lo ca procesando todo. Y si es por «desarrollarles la imaginación, hay mil formas de hacerlo sin necesidad de una mentira.